La próxima edición del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar costará al menos 10 millones de dólares, con lo cual se convertirá en uno de los más caros de su historia.
El diario chileno El Mercurio informó a través de su edición digital que "la inversión total, que incluye gastos operacionales, de promoción y contratación de artistas, superaría los 10 millones de dólares. Sólo la escenografía costará unos dos millones de dólares".
El certamen, que se realizará entre el 21 y el 26 de febrero próximo en Viña del Mar, distante 120 kilómetros al noroeste de Santiago, será producido y transmitido por primera vez por Chilevisión, del grupo estadunidense Turner Broadcasting System (TBS).
El anterior organizador, la Corporación de Televisión de la Universidad Católica (Canal 13), gastó unos 7.5 millones de dólares en la edición 2010, pero el récord lo tenía Mega que, asociada con Televisa, invirtió 8.5 millones de dólares en el Festival de 1994.
Ello según El Mercurio, que aclara que los canales nunca han revelado los costos que implica realizar el Festival, el 60 por ciento del presupuesto del certamen 2011 está destinado a la contratación de artistas, añade.
El invitado más caro a la próxima edición del Festival es Sting, que habría cobrado 700 mil dólares por su show, en tanto el mexicano Marco Antonio Solís habría solicitado 350 mil dólares y su compatriota Yuri unos 250 mil dólares.
Por otro lado, la iluminación tendría un costo de 277 mil dólares, mientras que para la escenografía se habrían destinado dos millones de dólares porque tiene un alto nivel de realización y tecnología, con pantallas LED incluidas.
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